proyecto fe
Fabiola López Sosa
Una señal que aparece, que se traduce y se interpreta, marca el inicio de una serie de reflexiones en torno al concepto de fe o de la fe, mismas que han sido transmitidas por el artista a través de diferentes vehículos de comunicación y que ahora se presentan en esta muestra como testimonio de una larga búsqueda interior a partir de una acción colectiva: el peregrinaje guadalupano.
El bordado de la virgen de Guadalupe (la señal), la bicicleta, la bitácora (o textos de viaje) y una cámara fotográfica son los elementos que permiten llevar a cabo la documentación de la acción, así mismo, siendo parte de la procesión hacia la Basílica de Guadalupe, el artista establece vínculos de identidad con el resto de los peregrinos, que movidos por un acto o idea de fe se congregan en la plaza donde se llevan a cabo las manifestaciones más profundas de un deseo colectivo.
A partir de esta acción surgen reflexiones a cerca del principio de fe o de la fe que se van materializando en una serie de “postales” en red que, de forma progresiva, van dilucidando el significado que para el artista tiene dicho principio. En esta muestra se presentan reproducciones de las mismas. Son pequeños textos ligados fuertemente a las imágenes que los acompañan. Imagen y texto se unen para formar un lenguaje diferente, un lenguaje social y espiritual. La fe es quizá el acto más significativo de confianza hacia lo que no se ve, pero que de alguna manera se sabe presente, es un caminar ciego con la certeza de que el camino es el correcto y que al final del mismo todo va a estar bien.
El envío de dichas “postales”-reflexiones a través del correo electrónico como parte fundamental del proyecto, puede ser interpretado como una metáfora del concepto de fe que el artista se ha formado, a saber, “no un proceso de comunicación inmediato y cerrado, sino mediato y abierto, en donde cada quien le da una interpretación personal.” De esta forma, utilizando “un dispositivo de comunicación pública y distribución social del conocimiento” –media– un acto de fe ha sido “metaforizado”, es decir, el envío de las postales tiene su análogo en el mando del pedimento, oración o deseo que se hace a través de la fe y lo único que resta es esperar a que sea atendido. Nuevamente las señales aparecen como respuesta, están ahí, esperando ser reconocidas.
De forma simultánea aparece la serie “fepost”, distribuida mediante el mismo canal de comunicación que las “postales” anteriores, sin embargo, existe una diferencia fundamental entre éstas y aquéllas. Fepost son imágenes generadoras de sentimientos que tienen cabida dentro de la fe y no están encaminadas a la reflexión necesariamente. Al observar cada una de ellas se tiene la sensación de estar frente a un pequeño milagro, dirá el artista: “humilde (el baño) o poderosísimo (el cielo), algunos opuestos y contradictorios...”, pero sin lugar a dudas todas las postales buscan ser “agradables a la vista.”
Proyecto Fe concluye con una pequeña acción colectiva de fe, iniciada en el momento mismo de la inauguración de la muestra. Ésta acción consiste en un intercambio de pequeñas estampitas, elaboradas por el propio artista, por actos o acciones de fe escritos en unas hojas en blanco por el público y pegadas con chinches sobre una mampara.
Así, de esta manera, el proyecto multidisciplinario presentado en este espacio ha recogido con gran simbolismo la acción de fe llevándola a un plano colectivo de manera que no haya espacio para el individualismo, donde el acontecer se muestra en su forma más pura, más honesta. Donde los individuos han dejado de ser individuos para formar un todo. Aquí, de éste lado la fe no sólo es depositada en una imagen, en un lugar, en un hecho, la fe se encuentra en todo y en todos. Aquí, lo más importante es tener fe en la fe.
